El sábado pasado, al ir a preparar unas fresas, me di cuenta de que estaban muy maduras, y que eran demasiadas para comerlas de una sola vez. Así que me puse a pensar que hacer con ellas. Se me ocurrió utilizar el agar-agar que hace tiempo que adquirí y que aun no había utilizado, para intentar hacer una gelatina...el resultado no pudo ser mas satisfactorio, por lo que tendré que estudiar más a fondo las posibilidades de este espesante natural, que tanto juego puede dar, sobre todo con los niños.
INGREDIENTES
- 500 grs. de fresas muy maduras
- 120 ml. de agua
- 3 grs. de agar-agar
- Aroma de naraja
- Leche condensada para decorar
Limpiamos y lavamos las fresas. Las colocamos en un bol y le añadimos el aroma de naranja. Trituramos con la batidora.
En un recipiente para microondas, ponemos el agua y el agar-agar. Removemos hasta su disolución y lo ponemos en el microondas a máxima potencia, durante 2-3 minutos, tiene que hervir durante 2 minutos vigilando que no se derrame, abriendo el microondas de vez en cuando para controlarlo.
Se deja que pierda un poco de calor. Volvemos a batir todo de nuevo, al tiempo que vamos añadiendo el agar-agar poco a poco, hasta que se integre con el resto de los ingredientes.
A continuación, vertemos la mezcla en un molde y lo ponemos a enfriar durante un mínimo de dos horas.
Lo servimos solo o con un poquito de leche condensada.
Espero que os guste esta otra forma de comer fresas......
¡Qué buena pinta!
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